Esta hermosa y larga historia comenzó un día en el que Dani me visito en mi antiguo taller en Medellín. Dani quería sorprender a Daniela con una pieza atípica y singular.

Al inicio llego con una idea en la cabeza de lo que quería, entre soluciones técnicas y nuevos desarrollos llegamos a una pieza llena de magia que para mi representa un valle de montañas irregulares, agudas y de color gris humo. Tardamos meses en solucionar detalles, en lograr una pieza única que representara aquel amor.

 El día del compromiso esta joya hacia parte de una escena surrealista que Daniel había creado para ella en medio de un bosque, un lugar encantador en el que nuestra creación cobraría su real vida.

Cata de CÂPÂ

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Fotos cortesia de Agustin Bedoya - @agfotografiayvideo